Hoy ha sido un día duro: he vuelto a trabajar.
Me he levantado pronto, me he arreglado y después de despedirme de mis peques se ha producido el regreso: Metro en hora punta, lleno de gente y en media hora ya estaba allí.
La sensación ha sido extraña. De camino al trabajo echaba de menos a los peques, las conversaciones con la princesa y el ir tranquilamente a mediodía a buscarla para pasar por el parque antes de llegar a casa.
Ayer la princesa me decía: Tu tranquil·la mama. Jo no t’anyoraré, estaré amb el papa. T’estimo fins al cel, ets la meva vida i ho seras sempre.*
Mientras preparaba mi neceser y ponía el cepillo de dientes me dijo: Mama al teu cole us diuen: A rentar les dents! Al meu noooo!**
Ahora a descansar y mañana vuelta a empezar. Me gusta estar en el mundo laboral, me gusta mi trabajo. Pero me encantaría poder permitirme reducir la jornada laboral y disfrutar más de la familia, que es lo que más me gusta.
* No te echaré de menos, estaré con papá. Te quiero hasta el cielo, eres mi vida y lo serás siempre.
** Mamá en tu cole os dicen: ¡A lavaros los dientes! ¡En el mío no!!!