Llamador de Ángeles

Hoy hemos quedado para pasear, una vez más sin rumbo “H” y yo. Y como siempre nos pasa algo. Primero en una tienda de mascotas, una anécdota que he decidido resetear de mi memoria y, más tarde, en la Pl. del Pi he visto un colgante en el suelo. Le he dicho a “H” mira qué colgante y le ha dado cosa cogerlo. Así que yo, que me ha llamado la atención, lo he recogido.

"H" me ha explicado que en Italia se lo regalan a los niños recién nacidos (si me equivoco, me corriges) y cuando he llegado a casi me han dicho que se llama "llamador de Ángeles" y que se les regala a las mujeres embarazadas. Trae suerte. No me lo han regalado, pero soy de las personas que creen que no pasa nada por casualidad y me ha hecho gracia encontrármelo, estando embarazada.

En internet he encontrado varias referencias, algunas de ellas bastante esotéricas. D me ha dicho que haga lo que me dicte el corazón, que las cosas son lo que uno quiere que sean (estoy de acuerdo con él), así que me lo quedo, lo llevaré y mala suerte seguro que no traerá.

Os dejo la imagen del tesoro que he encontrado:



Y algunas de las referencias:

Llamador de ángeles, delicado sonido al chocar en su interior trocitos de plata.

Su sonido atrae a las energías angélicas para que puedas sentir su protección, apoyo y amor a tu lado. En la India y otros países las mujeres embarazadas los llevaban a la altura del ombligo para proteger al bebe de cualquier negatividad externa, incluso de los shocks o traumas que pudiera sufrir la madre. Usado desde la época medieval como protector.

Su sonido es armonizador, trayendo paz y alegría al espíritu, hazlo sonar cuando desees algo de corazón.

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A veces al amanecer, cuando no sabemos con certeza si estamos dormidos o despiertos, o a la hora del crepúsculo cuando las sombras nos hacen dudar de nuestros sentidos, adivinamos invisibles presencias, susurros, aleteos, risas contenidas, y hasta puede rozar nuestra mejilla algo que no podemos definir. Son los ángeles: vienen y van, escuchando nuestros secretos y susurrándonos melodías. Ahora si tal vez los perdiste en el apuro por vivir, aquí hay para tí un llamador de Angeles, para que puedas convocarlos...

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Leyenda

Cuenta la leyenda que hace miles de años unos duendes que compartían amistad con os Ángeles, tuvieron que huir del bosque donde vivían, por ello los Ángeles como símbolo e protección les regalaron unos cachivaches que solo ellos podían llevar colgados.

Los Ángeles explicaron a los duendes que siempre que se viesen desprotegidos o en peligro debían de agitar la bola y ellos acudirían para protegerles.

Los duendes que en más de una ocasión tuvieron que utilizarlo decidieron de llamarlos "Llamadores de Ángeles".

Muffins de fresas frescas

Hace unos días “H” me contó que había hecho unos panecillos con una receta sacada de La maleta de Boston. Tomé nota y empecé a navegar.
De todas las recetas que hay, me encantaron los muffins y los panes. Con lo que tenía en casa hoy me he puesto a preparar muffins. He aprovechado que teníamos previsto comer pizza y que el horno ya estaría caliente para hornearlos.
Aquí tenéis el resultado



Y aquí la receta copiada de aquí:

Ingredientes:
-300 grs. harina
-100 grs. azúcar blanco
-100 grs. azúcar moreno
-125 grs. mantequilla derretida
-250 grs. fresas frescas
-5 ml. levadura (Royal) 1 cucharita postre colmada
-1 cucharita de café, de bicarbonato
-1 pizca de sal
-3 huevos
-250 ml. leche entera
Preparación:
-Precalentar el horno a 200º, preparar una bandeja para 12 muffins con sus moldes.
-Lavar las fresas, quitar los pedúnculos y cortar a dados pequeñitos. Reservar.
-En un bol mezclar la harina, la levadura, la sal y el bicarbonato. Reservar
-En otro bol verter los huevos, el azúcar, la mantequilla y la leche, con la ayuda de un batidor de mano batir enérgicamente.
-Seguidamente añadir la harina y las fresas y trabajar ligeramente.
-Disponer en los moldes
-Hornear durante 15-20 minutos.
Nota: Llenar los moldes hasta tres cuartas partes.

Espero que os gusten.
Hace algunas semanas, viendo las noticias me sorprendió una grata noticia.

En diciembre os hablaba de mi flechazo con una librería en Lisboa, la Libreria Bertrand, que además es la librería más antigua de Europa. Pasados dos meses, esta cadena ha hecho una gran apuesta en nuestra ciudad, Barcelona, y ha abierto una librería con más de 140.000 títulos. Una gran apuesta en momentos de crisis. Estamos acostumbrados a que los grandes espacios del centro de la ciudad pasen a manos de firmas de ropa como H&M y ZARA, con lo que me alegra que se invierta en cultura.

Con motivo de mi encierro de dos días fuimos a verla, quería tener algo para leer, pues la tele no me entusiasma. Cuando entras, tienes la perspectiva de toda la librería y da la sensación que no tiene fin. Visitamos media librería y por un momento me perdí entre tanto libro, no sabía donde escoger. Como cabía esperar, tienen libros de todas las temáticas y el trato de los dependientes es muy cordial.


Salimos con tres libros bajo el brazo y al ir a pagar me preguntaron si tenía a tarjeta de la librería. Pensé ya quieren datos personales y a enviar correos electrónicos. Pues no, es una tarjeta en la que te ponen más o menos sellos dependiendo del importe de la compra y cuando la tienes llena te hacen un descuento. Pero no tienes que rellenar ningún formulario ni abonar ninguna cantidad.

En la apertura anunciaron conferencias, presentaciones, talleres y hasta exposiciones, conciertos y teatro con lo que espero que el tiempo la consolide como una de las grandes librerías de la Ciudad Condal.

Su siguiente reto será la próxima semana, que celebramos Sant Jordi.


Miedo

Cuando tienes un hijo, empiezas a entender a tus padres. Recuerdo cuando mi peque nació y a los dos días la ingresamos por un golpe de calor. Ella estaba indefensa y nosotros eramos padres novatos. Te invade el miedo y no sabes qué pasa, en ese momento era fiebre alta en un recién nacido de dos días. De repente te das cuenta que esto es para toda la vida, te divertirás con ella, pero también sufrirás.

Hoy me han hecho una amniocentesis. Sé que actualmente esta prueba no conlleva mucho riesgo. Pero ha habido un momento de miedo, de nervios y ganas de llorar. Es difícil explicarlo. En un instante he sido consciente de lo que quiero a mi pequeño, de lo importante que es para mí y de lo que me costaría tomar la decisión fatal. Miedo a no hacerme la prueba porque me conozco y le daría vueltas a mi cabeza con y si… y miedo a que con la prueba algo vaya mal.

En fin, necesitaba escribir, sacarlo, dos días de reposo y una vida para contarlo.

PD: Espero escribir pocos post así, si ya los que dejáis comentarios sois un grupo reducido, con post tan intelectuales como este, me quedo sola. ;D

El grito

Para ilustrar el post anterior os dejo un cuadro que siempre me ha fascinado. El grito de Edward Munch. Esta imagen es la que mejor puede expresar mi miedo.


De la página Ciudad redonda recojo la cita del artista de 1895:

"Iba por un largo camino con dos amigos mientras se ponía el sol. El cielo se tornó de repente de color rojo sangre, me detuve exhausto y vi sobre la ciudad sangre y lenguas de fuego. Mis amigos continuaban caminado, pero yo temblaba de pánico y sentía que un enorme e infinito grito atravesaba la naturaleza".

Descubriendo la telehuerta

Desde que nació Andrea me he hecho una asidua a la revista Elle. Antes era de las que decía que la revista era una cursilada y que yo no era de esas chicas que están todo el día pendiente de las últimas tendencias. Bien, durante mi baja por maternidad descubrí que no sólo hablan de moda, sino que publican artículos y entrevistas muy interesantes y siempre descubre alguna curiosidad nueva.

En la revista del mes de abril me ha sorprendido el artículo sobre telehuerta. Sé que lo que no encuentres en internet no existe y que no hay nada que ya no esté inventado, pero el hecho de que haya empresas que te lleven a casa periódicamente frutas y verduras, lo desconocía (sí, Isabel, ya tuve mi momento “qué fuerte! Venden naranjas por internet!”).

He entrado en las páginas que comentan en el artículo: Disfruta verdura, Frucit, Mil historias y Fashion fruit. Me quedo con la última. En mi caso no me saldría a cuenta que traigan a casa cada 15 días 9 quilos entre frutas y verduras. Además me gusta ir a comprarlas a la frutería. Pero encuentro que la última te ofrece la posibilidad de hacer un regalo original y útil, siempre y cuando a a homenajead@ le guste a fruta. Os dejo foto de las cestas, que además crean un equipo de estilistas.


PD dedicada a D: Si no te das por aludido (sé que no comentas, pero lees este blog), que sepas que si cuando nació la peque te pedí un ramo de flores, esta vez te pido una cesta de frutas, je, je, je.